sábado, 1 de mayo de 2010
1 de mayo, muy poco que celebrar
El 10 de diciembre de 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó y proclamó la Declaración Universal de Derechos Humanos, estableciendo en su articulo 23 el derecho de todo ser humano a un trabajo digno.
Hoy es el día del trabajo, un día de reivindicación y lucha que se ha desvirtuado hasta lo absurdo. España cierra el primer trimestre del año con 4.612.700 desempleados y una tasa de paro el 20,05%, la más alta registrada desde 1997 y casi 1.330.000 familias tiene a todos sus miembros en el paro (datos del Instituto Nacional de Estadística).
Los que tenemos la suerte de tener trabajo vemos atónitos como todos nuestros derechos han ido reduciéndose poco a poco en la lógica del neoliberalismo imperante. Todas las alarmas están sonando. La crisis provocada por los mercados financieros y la banca está llevándose por delante los avances sociales que se habían logrado en el pasado y la posibilidad de tener un futuro y una vida digna a muchas personas.
Lo más indignante es que junto a las cifras del paro uno puede leer en los medios de comunicación los beneficios y sueldos de los que nos metieron en este lio, los mismos que nos exigen con desfachatez que nos apretemos el cinturón.
Sólo dos ejemplos:
1.- Goldman Sachs: uno de los grupos de inversión más grandes del mundo, responsable del fraude de las hipotecas subprime según la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos, tuvo el primer trimestre del año unas ganancias de 3.460 millones de dolares, un aumento del 36% frente a un año atrás. (más información aquí).
2.- El consejero delegado del banco de Santander, Alfredo Sáenz, se jubilará con una pensión de 85,7 millones de euros. (más información aquí)
Quizás te pueda interesar:
¡¡Pobrecitos Bancos!!
El nefasto impacto social de la globalización neoliberal
Ni un paso atrás con las pensiones
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario